DE MERLO AL MUNDO POR LOS TATUAJES, CON LA MISMA HUMILDAD DE SIEMPRE

Martin Santellan, más conocido como Tattoo Cabeza, vive en Merlo y gracias a su gran trabajo ayuda a su familia. Martin se destaca por tatuar a jugadores de fútbol profesional y por ir a Chile, para ser mas precisos Iquique, para también llevar su arte ahí.

Martin Santellan (Tattoo Cabeza)

El sueño del pibe era jugar al fútbol, pero cuando se dio cuenta que dejó de ser divertido y pasó a ser una responsabilidad, decidió dejarlo e inclinarse por los tatuajes, su otra pasión. No sabemos qué hubiera sido de su vida si seguía con el fútbol, lo que sí sabemos es que logró cosas inimaginables con los tatuajes. Santellan y su familia viven un buen presente, sin embargo, su infancia y adolescencia fueron muy diferentes y él no se olvida de eso. Por eso una de las claves de su éxito como tatuador es la humildad con la que trabaja y el sacrificio que le mete día a día para cada vez mejorar más.

Los tatuajes le cambiaron la vida, comenzó a los 15 años sin apoyo de nadie y hoy con 40 años es un orgullo para su familia. Su pasión por el tatuaje comenzó cuando acompañó a un amigo a tatuarse y quedo enamorado de lo que había visto: “quiero hacer esto” comentó. Pero no era nada fácil tatuar, era una gran incógnita para Tattoo Cabeza trasladar el arte a las pieles. Además, en esa época los tatuajes no eran lo que son ahora, era todo mucho más difícil: “en aquel tiempo se tatuaba con agujas de cocer número once” explicó Santellan. Él aprendió a puro sacrificio, se iba los lunes a la Galería Bond Street, ubicada en Avenida Santa Fe al 1670, y se la pasaba todo el día: iba desde las once de la mañana y se quedaba hasta la medianoche pasando por todos los locales para ir aprendiendo de cada tatuador, una locura.

Así se fue formando como tatuador, primero empezó tatuando en su pieza a amigos y familiares, y ahora tiene su local propio donde la gente no para de hablarle para poder tener su arte en su piel. Tattoo Cabeza no sólo es conocido por su gran historia, sino que está en el punto más alto de su carrera ya que sus últimos trabajos fueron a los jugadores de Boca: a Wilmar Barrios, Edwin Cardona y Sebastián Villa, entre otros. No solo tatuó a jugadores de Boca, sino que también paso por lo demás clubes grandes exceptuando River. Tatuó a una gran cantidad de jugadores de primera y del ascenso, contó que Rodrigo, el Rengo, Díaz fue el primer jugador que tatuó, y ahí comenzó todo. También confesó que tiene como espinita no poder haber tatuado a ninguno de los jugadores de River, reconoció ser fanático del Millonario.

Los jugadores de Boca Juniors que tatuó:

Con Edwin Cardona, Sebastián Villa, Wilmar Barrios, Sebastián Pérez y Julio Buffarini.

Rodrigo Díaz, el comienzo de todo:

Con la camiseta de Deportes Iquique y la de Deportivo Morón.

El Rengo Díaz no sólo le permitió tatuar a más jugadores, sino que también le ofreció viajar a Chile, a Iquique, cuando él era jugador de ahí para que vaya a tatuar a sus compañeros y que su arte no se quede sólo en Argentina. Tattoo Cabeza ya fue varias veces a Chile, justamente hace unas semanas volvió de ahí, y siempre esta agradecido de las personas que le dieron la oportunidad de crecer. Actualmente es un gran amigo del Rengo, y también formo una gran amistad con Gerardo Martínez, otro de los campeones con Deportivo Morón en la B Metropolitana.

Los de Deportivo Morón:

Con Nicolás Martínez, Milton Álvarez, Matías Pardo y Gerardo Martínez.

Volviendo a su familia, su hijo, conocido como Huevo, decidió seguir sus pasos y esto es un orgullo para él. En este momento, comparte el local con su hijo y con otro chico más, esto demuestra la humildad y solidaridad que tiene Martin con sus pares. En fin, lo de Martin Santellan no fue cuestión de suerte, si no que todo lo logró con sacrificio y hoy disfruta de sus logros.

Con su hijo el tatuador: